¿Empezamos la casa por el tejado?
Por “extraña” que parezca la propuesta, ésta debería ser una de nuestras principales preocupaciones a la hora de plantear la construcción de nuestro nuevo hogar o mantener el que tenemos. Desgraciadamente, la cubierta de nuestra casa, no suele ser una de nuestras prioridades o preocupaciones.
Cuando hablamos de nuestra casa, de nuestra vivienda, de nuestra comunidad de vecinos… nos preocupamos de muchos aspectos como la estética de la fachada, tener un portal bonito, la confortabilidad y habitabilidad del interior del inmueble, la buena distribución de espacios, la movilidad, contar con buenos materiales constructivos, disponer de equipamientos de última generación, etc…
Hasta aquí todo perfecto y, en buena medida, fácil de entender. Pero que nos pasa demasiadas veces, pues que “nuestra mirada” suele ser en horizontal y como mucho si tenemos que mover “los ojos” miramos hacia abajo, pero que poco nos gusta mirar hacia arriba y mucho menos hacia el tejado. Sin duda, una mala costumbre que nos puede provocar muchos sustos y dolores de cabeza.
Habitabilidad, aislamientos de las temperaturas del exterior, estética, sostenibilidad enegética
Sin duda, el tejado, junto con los cimientos, columnas, muros y vigas, es la parte más importante de la estructura de nuestra vivienda. Un componente clave para su correcta habitabilidad y aislamiento; además de aportar otros valores de carácter estético, económico y medioambiental.
Por eso, tanto una correcta elección del tipo y características del tejado, ya sea de obra nueva o en la remodelación del viejo, como un correcto y continuado mantenimiento del mismo serán claves para vivir, trabajar y disfrutar correctamente de nuestra hogar, vivienda, empresa…
Por eso, os animamos a empezar la casa por el tejado. Es decir, siendo conscientes de su importancia para la confortabilidad, aislamiento, estética y como espacio para instalar nuevas fuentes de energía sostenible.
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